Vistas de página en total

viernes, 7 de septiembre de 2012

LA HOJA DE RUTA DEL NEOLIBERALISMO

La espiral depredadora en la que ha metido a la sociedad española el gobierno sietemesino de Rajoy, con la toma de medidas contradictorias respecto a los objetivos confesados, en un aparente gesto de improvisación ante la crisis o carencia de programa político, ha sido solo el síntoma engañoso de que no ha sido así, sino el cumplimiento -con paso apresurado, eso sí, de recuperación del tiempo perdido- de la hoja de ruta del neoliberalismo en Europa. Acercarnos al clarividente trabajo "La catástrofe perfecta" del excelente periodista Ignacio Ramonet, publicado hace tres años, aclara lo que decimos.
Fue en los años 70, cuando el sistema capitalista, dirigido entonces por los Estados Unidos, puso en marcha la maquinaria depredadora del Neoliberalismo, con la doctrina de tres desalmados economistas entregados el cuerpo y alma a echar por tierra las tesis de Keynes, que propugnaba la necesidad de una regulación de la economía para que ésta se desarrolle socialmente: Schumpeter, Hayek y Friedman. El primero decía que las crisis económicas son naturales y provocadas por el propio crecimiento del sistema y que sus víctimas -trabajadores en paro, pensionistas sin ahorros, ruina de pequeñas empresas- son únicamente "daños colaterales", ya que lo importante es que de esa císis salga reforzado el sistema capitalista. Hayek, fue mucho más allá, convertido en ideólogo del neoliberalismo. Criticaba la más mínima regulación de la economía y que el Estado interviniera socialmente de manera pública. Para él, el Mercado, dios neoliberal, siempre tiene razón. Sin la intervención del Estado, aunque fuera lo más mínimo, evitaba en beneficio del capitalismo salvaje, que las clases medias pudieran llevar a cabo ciertas medidas de caracter social. Su programa era desregular, privatizar, limitar la democracia, suprimir las subvenciones para la vivienda y el control de alquileres, disminuir los seguros de desempleo, reducir los gastos de seguridad social y quebrar los sindicatos. ¿Les suena?
Friedman fue el instigador de la violencia capitalista con su postulado de que "el libre mercado es un sistema científico perfecto en el cual particulares que actúan en su propio interés crean, para todos, la mayor cantidad de ventajas posibles". Para él, la única función del Estado es "proteger nuestra libertad de sus enemigos externos y de nuestros propios ciudadanos. Hace que reinen  la ley y el orden, hace que se respeten los contratos privados y favorece la competencia". Lo clave es que no se ocupe de la economía. Según Friedman, la toma del poder sea democráticamente o por golpe de estado, tiene como principal objetivo imponer de modo inmediato cambios económicos radicales. Cualquiera que sea el coste social ¿Les suena? Un nuevo gobierno -afirmaba- goza de un periodo de gracia de 6 a 9 meses durante el cual puede operar cambios fundamentales que si no aprovecha para actuar con determinación, no volverá a tener ocasión semejante. ¿Les suena?
En ese tiempo pondrán en funcionamiento una nueva concepción económica recurriendo a una terapia de shock, desarrollando una gran campaña en los medios de comunicación afines, queriendo convencer que el gran número de parados es consecuencia de que el mercado no es suficientemente libre. ¿Se acuerdan de los motivos que justificó el PP para emprender su primera medida de reforma laboral?
Todo este equipo neoliberal y sus discipulos, trabajaron codo a codo con el sanguinario dictador Pinochet y con Videla en Argentina, provocando privatización de empresas del sector público, reducción del presupuesto del Estado y despido de miles de funcionarios, flexibilidad de empleo, privatización de los sistemas de jubilación y salud, etc. ¿Le suena? Hayek incluso llegó a declarar en 1981 que su preferencia personal se inclinaba por una dictadura liberal "y no un gobierno democrático donde todo liberalismo esté ausente". Sostenía que el triunfo del fascismo y el nazismo en Italia yAlemania en las décadas de 1920 y 1930 no había sido sino una reacción contra los "excesos socialistas" del periodo anterior. Según él, Mussolini, Hitler y Franco o Pinochet debían su ascenso al poder al fracaso de las experiencias socialistas precedentes. Sin embargo, la aplicación del Neoliberalismo y su terapia de shock experimentó, por ejemplo, en el Chile de Pinochet el retroceso del 15% de su economía, y el aumento del 3 al 20% de la tasa del desempleo rspecto a Allende, solo en el primer año. ¿Les suena? Después de 15 años, el 45% de los chilenos estaban por debajo de la línea de pobreza. A cambio, ¡Friedman recibió el premio Nobel!
Lo peor de este doctrinario ultraliberal es que se presenta como solución universal a todos los problemas económicos e intentando convencer a los pobres de que son los únicos responsables de su situación ¿Les suena? En esta empresa de persuasión colectiva colaboran los grandes medios de comunicación controlados por el neoliberalismo.
Una vez desplomado el muro de Berlín, en su apogeo la era Reagan -que junto a Margaret Thatcher en Inglaterra ejemplifican el summum ultraliberal del capitalismo-, se pone en marcha el famoso "consenso de Washington", por el que cualquier país que quiera ser admitido en el seno de la comunidad internacional, debía plegarse a los siguientes 10 mandamientos: Disciplina en materia de déficit público, redefinición de las prioridades en materia de gasto público, reforma fiscal, liberalización de las tasas de interés, adopción de tasas de cambios competitivas, liberalización de los intercambios comerciales internacionales, liberalización de las inversiones directas extranjeras, privatización de las empresas públicas y el sector público, desregulación de los  mercados, y protección de los derechos de propiedad. ¿Les suena? Al margen, como afirmara Thatcher "there is no alternative". Para conseguirlo, Washington ejercerá la necesaria presión y reclutará los llamados "asesinos financieros", profesionales altamente retribuidos que estafan miles de millones, redirigiendo ese dinero del Banco Mundial a las grandes compañías y familias multimillonarias que controlan los recursos del planeta, con informes fraudulentos, fraude electoral, sobornos y hasta asesinato. ¿Les suena? Gracias a ello el Fondo Monetario Internacional (FMI) se ha convertido en el ministerio de economía mundial, como lo es en Europa el Banco Central Europeo (BCE) dirigido por Draghi. Como consecuencia, el mercado y el sector privado destruyen lo colectivo y se apropian de las esferas pública y social. Somete a las empresas y ciudadanos a tener que adpatarse, a plegarse a su voracidad, evitando cualquier alternativa, cualquier intento de regulación democrática. La competitividad es la única fuerza motriz, para sobrevir. Constituye un saqueo ecológico del medio ambiente sin  escrúpulos y sin freno.
La siguiente fase de esta hoja de ruta, se inició en 1983 cuando el FMI impuso el primer programa de "ajuste estructural" a todos aquellos paises que pedían préstamos improtantes para su desarrollo. A partir de esta década, los ministros de economía del G-7 (los más ricos) empiezan a exigir a los paises pobres que sacrifiquen los gastos de salud, educación o empleo para pagar la deuda, y el FMI se encarga de que las privatizaciones se hagan a precio de liquidación ¿Les suena? ¿Y quien era hasta hace unos meses el director del FMI?  Pues, Dominique Strauss-Kahn, descabalgado del puesto acusado de intento de violación de una camarera de un hotel, lo cual acabó con su carrera política, ya que iba a ser el candidato socialista a la presidencia francesa.
 
*fuente: "La catástrofe perfecta", Ignacio Ramonet